MANIFESTACIÓN
Jueves, 17 de Diciembre del 2009.
ESTACIÓN RENFE DE OVIEDO
20:00 horas.
El Alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, y su Equipo de Gobierno han elaborado una "Ordenanza municipal de Convivencia Ciudadana" que pretenden aprobar en próximas fechas.La aprobación de dicha Ordenanza, que se presenta a sí
misma como garantía de “la libre circulación de las personas” y
del “derecho a disfrutar del paisaje urbano y los espacios
públicos”, supondría en realidad justo lo contrario de lo que dice
defender.
El derecho a la ciudad se convertiría en un derecho
exclusivo de una parte de la ciudadanía, ya que la ordenanza
supone un ataque a los colectivos más vulnerables
(“mendigos”, inmigrantes, prostitutas), que serían duramente
reprimidos. Multas de hasta 750 euros por ejercer la mendicidad
son buen ejemplo de ello.
La ordenanza tampoco quiere a la juventud en las calles
de la ciudad. Por eso prohíbe la práctica de juegos en calles y
plazas. Establece además multas de hasta tres mil euros por el
consumo de “bebidas alcohólicas o similares” en los espacios
públicos. No nos engañemos: esta medida no busca restringir el
consumo de alcohol, sino garantizar que se realice pagando los
precios de bares y terrazas.
Con el objetivo de mantener la ciudad en condiciones de
“limpieza, pulcritud y ornato”, la ordenanza restringe el derecho
a la libertad de expresión, al multar con hasta tres mil euros la
realización de “cualquier tipo de pintada” o “expresión gráfica”.
Las restricciones a las pegadas de carteles, repartos de
octavillas y otras formas de comunicación –que ya se vienen
produciendo desde hace tiempo- impiden trasladar sus
propuestas a la ciudadanía a asociaciones de vecinos,
colectivos sociales y culturales y grupos políticos.
La ordenanza establece además la obligación, bajo
multa de hasta 1500 euros, de suministrar datos e información a
los agentes policiales y autoridades, convirtiendo a los
ciudadanos/as en “chivatos” que deben denunciar todo lo
“ilegal” que la Policía, según su criterio, considere que regula la
ordenanza.
No extraña, por todo ello, que el texto de la Ordenanza
esté firmado por el Jefe de la Policía Local, Agustín de Luis,
responsable en la actualidad de la persecución al colectivo
inmigrante por las calles de Oviedo, y ex-miembro de la Brigada
Político-Social del franquismo. Verdaderamente, algunas de las
medidas de la Ordenanza recuerdan otras épocas…
misma como garantía de “la libre circulación de las personas” y
del “derecho a disfrutar del paisaje urbano y los espacios
públicos”, supondría en realidad justo lo contrario de lo que dice
defender.
El derecho a la ciudad se convertiría en un derecho
exclusivo de una parte de la ciudadanía, ya que la ordenanza
supone un ataque a los colectivos más vulnerables
(“mendigos”, inmigrantes, prostitutas), que serían duramente
reprimidos. Multas de hasta 750 euros por ejercer la mendicidad
son buen ejemplo de ello.
La ordenanza tampoco quiere a la juventud en las calles
de la ciudad. Por eso prohíbe la práctica de juegos en calles y
plazas. Establece además multas de hasta tres mil euros por el
consumo de “bebidas alcohólicas o similares” en los espacios
públicos. No nos engañemos: esta medida no busca restringir el
consumo de alcohol, sino garantizar que se realice pagando los
precios de bares y terrazas.
Con el objetivo de mantener la ciudad en condiciones de
“limpieza, pulcritud y ornato”, la ordenanza restringe el derecho
a la libertad de expresión, al multar con hasta tres mil euros la
realización de “cualquier tipo de pintada” o “expresión gráfica”.
Las restricciones a las pegadas de carteles, repartos de
octavillas y otras formas de comunicación –que ya se vienen
produciendo desde hace tiempo- impiden trasladar sus
propuestas a la ciudadanía a asociaciones de vecinos,
colectivos sociales y culturales y grupos políticos.
La ordenanza establece además la obligación, bajo
multa de hasta 1500 euros, de suministrar datos e información a
los agentes policiales y autoridades, convirtiendo a los
ciudadanos/as en “chivatos” que deben denunciar todo lo
“ilegal” que la Policía, según su criterio, considere que regula la
ordenanza.
No extraña, por todo ello, que el texto de la Ordenanza
esté firmado por el Jefe de la Policía Local, Agustín de Luis,
responsable en la actualidad de la persecución al colectivo
inmigrante por las calles de Oviedo, y ex-miembro de la Brigada
Político-Social del franquismo. Verdaderamente, algunas de las
medidas de la Ordenanza recuerdan otras épocas…
POR ESTAS RAZONES, DIFERENTES ASOCIACIONES, COLECTIVOS, ORGANIZACIONES, PARTIDOS POLITICOS, .....OVETENSES, PEDIMOS LA RETIRADA DE LA ORDENANZA.